Pero ya caminan juntos y el pasado solo es aire.
Todo podía ocurrir, pero no ocurrió. Lo cierto es que cuando esperas tanto algo, olvidas esperar cualquier cosa de ti. Reconozco que también me falta la voz al intentar hablar sobre lo que calla mi silencio. Miedos tengo demasiados, y sigo desafinando al cantar las canciones que me recuerdan a mí. Pese a las razones que pueda tener para escapar, sólo necesito una pequeña excusa para quedarme. No entenderme nunca me ha importado demasiado, aunque si las cosas duelen me conformo con cualquier respuesta. Si me canso de luchar hasta la derrota me parece un lugar precioso. Él parecía esa calma que prometían después de la tormenta, lo único que sucede es que no ha dejado de llover desde hace tiempo. Si lo pienso, juraría que se me ha olvidado la sensación del sol sobre la piel.

No hay comentarios: